PELÍCULA: The Mortal
Instruments: City of Bones (USA)/Cazadores de Sombras: Ciudad de Hueso (México)
DIRECTOR: Harald
Zwart.
GUIÓN: Jessica
Postigo Paquette, basado en la novela de Cassandra Clare
REPARTO
PRINCIPAL: Jamie Campbell Bower, Lily Collins, Kevin Zegers, Jemima West, Robert
Sheehan, Godfrey Gao, Lena Headey, Aidan Turner, Jonathan Rhys-Meyers.
AÑO: 2013.
PRODUCCIÓN: Don
Carmody y Robert Kulzer.
CASA PRODUCTORA: Constantin Films/Unique Features
DURACIÓN: 124
minutos
SINOPSIS: Clary
Fray, la típica adolescente americana que tiene una madre controladora y un
pasado que podría tacharse de incierto, descubre tras el violento secuestro de
su madre que su vida no es lo que ella creía y que existe todo un mundo que la
gente normal no puede ver. De la mano de
Simon, su mejor amigo y Jace, el chico rudo que la rescata, va recobrando
trozos de esa historia que nunca le contaron y que va descubriendo incluso bajo
riesgo de su propia vida.
CRÍTICA: Con
Cazadores de Sombras: Ciudad de Hueso, nos encontramos con una de las
adaptaciones más esperadas al cine de sagas literarias y si bien, no es una
historia que va a pasar a la posteridad al nivel de un Harry Potter, tiene
todos los elementos para ser una lectura no sólo recreativa, sino de interés al
plasmar un universo fantástico que está entretejido en la realidad de nuestro
mundo cotidiano.
A pesar de
que la historia por sí misma, daba suficiente para una cinta bien lograda y con
una producción que pintaba para ser espectacular, simplemente quedó debiéndole
mucho a todos los fanáticos de la saga... y de pasada al espectador casual que
tuvo a bien tropezarse con la cinta por algún evento fortuito. En las siguientes líneas, se analizará a
detalle la producción cinematográfica en cada elemento y por supuesto, en el
contraste con el texto original.
DIRECCIÓN: Si bien Harald Zwart no se ha distinguido por
participar en películas memorables y a decir verdad, su último proyecto previo
a CoB, fue uno de los peores remakes que se han visto en la historia del cine
(Karate Kid con Jaden "Soy hijo de mi papi" Smith), en la producción
de Constantin Films tenía la oportunidad perfecta para redimirse. La realidad es, que al ver el producto final,
no sé que parte está más incompleta: si el diseño de dirección o el formato de
filmación.
Tras una
observación minuciosa de la cinta, puedo concluir que la forma en que fue
dirigida y editada para el final cut, fue creada única y exclusivamente para
fines comerciales y totalmente dirigido a una audiencia que estaba más deseos
de ver fan service de los actores sin camisa o la escena -demasiado extendida
para mi gusto- del invernadero; motivo por el que la película en sí, tiene
huecos argumentales serios que, futureando un poco respecto a la segunda
entrega de la saga, no logro explicarme cómo lograrán subsanar.
La forma en
que el ensamble final fue editado, a pesar de dar una película que es dinámica
en desarrollo, deja al espectador que no está familiarizado con la historia,
con un montón de lagunas en la secuencia de la historia y si sumamos estos
errores tan fuertes, con una propuesta actoral pobre, tenemos como resultado
una película que con trabajos llega a ser mediocre.
GUIÓN: En este
rubro es donde cae una de las más grandes responsabilidades sobre el cómo pueda
funcionar una película, por la simple razón de que el guionista es el que tiene
en sus manos el poder de lograr que una historia sea memorable, o que sea
sepultada en lo más profundo del olvido de los espectadores. Puestos en contexto, ha de mencionarse que a pesar que el esfuerzo
de Jessica Postigo por hacer un guión interesante fue grande, queda muy claro
que su calidad de guionista principiante hizo que le quedaran grandes los
zapatos.
Parte
primordial de las deficiencias en el guión de Postigo, radica en que eliminó
partes sustanciales de la historia, como por ejemplo la omisión de personajes
que tendrán un peso importante en el resto de la saga, sucesos que fueron
relatados de forma distinta y las dos cerezas en el pastel: Hodge como autor intelectual del embrollo
"si le decimos a Clary y Jace que son hermanos, se volverán dóciles como
borreguitos por tener el corazón roto", y la tan esperada pelea final...
sin hombres lobo en lobo, sin renegados, sin la bonita pelea y duelo de
ingenios entre Luke y Valentine... sin el trozo de portal que es una parte
IMPORTANTÍSIMA de la trama del segundo libro.
Finalmente,
a pesar de que logró el objetivo de entretener al público, no logró enganchar
lo suficiente como para generar un verdadero interés de gente que no pertenece
al fandom, y si hablamos de la gente del fandom, lo que logró fue darles una,
otra y otra vez cucharadas bien amargas de una adaptación terriblemente
lograda.
REPARTO: Mucho se
ha discutido en diversos foros y varias partes del fandom sobre este tema, la
realidad es que a pesar de que en su mayoría, el casting no fue malo, le faltó
el encanto necesario para cautivar a los espectadores. En las siguientes líneas, revisaremos un poco
la trayectoria de los actores y su interpretación dentro de la cinta.
LILY
COLLINS: Nacida en Surrey, Inglaterra, la hija de
Phil Collins es bien recordada por su participación en cintas como The Blind
Side, Stuck in love y Mirror, Mirror. En
el caso de Lily, hablamos de un talento bastante joven, que tiene técnica para
actuar, adolece de dos cuestiones básicas: carisma y expresión. A pesar de las 7 películas en las que ha participado,
Lily aún tiene un largo trabajo por delante, especialmente en lo que se refiere
al trabajo en su expresión facial. En el
caso que nos ocupa, Collins parece
demasiado frágil y desorientada para ser Clary, el personaje que -a la fuerza-
termina siendo fuerte y aguerrido porque no le queda más que serlo o no
sobrevivir, este desarrollo no se ve en la evolución de la película, e incluso,
es observable como Clary lejos de hacerse fuerte, va titubeo tras titubeo.
JAMIE
CAMPBELL BOWER: Habiendo participado
en más de diez películas y dos mini series, este Londinense, a sus cortos
veinticuatro años de edad, goza de una carrera sólida y prolífica donde es bien
conocido por sus ocurrencias y excentricidades.
Físicamente, es un prototipo poco común de lo que puede entrar en la
definición de la belleza masculina, sin embargo, esos ojos azules en forma de
almendra, parecen tener un encanto que pocos pueden resistir. En el caso de CoB, nos encontramos con un
Jace que no tiene el rostro angelical al que tanto refieren en el texto
original, y aunque vemos al arrogante y pagado de sí mismo Jace que se leyó, la
actuación no termina de ser convincente, es como si le faltara más a él como
actor y en general a su química en pantalla con Collins.
LENA
HEADEY: Con una trayectoria solidísima de más de
30 películas, 7 cortometrajes, 2 participaciones en videojuego y 15 Series de
TV, nos encontramos con uno de los miembros más fuertes del casting, cuya
interpretación a pesar de ser breve, resulta soberbia, desde la fase de la
madre aprehensiva y totalmente neurótica, hasta esa guerrera que peleó en su
juventud al lado de Valentine y después nos sorprende con esa magnífica golpiza
a sus dos agresores con objetos tan comunes como puertas, sartenes y hasta la
puerta del refrigerador. Futureando un
poco hacia Ciudad de Cristal, si es que logran consolidar la segunda entrega
para continuar con la saga, podremos encontrar una interpretación muy fuerte y
muchas más sorpresas agradables dentro de su trabajo histriónico.
AIDAN TURNER: Este Irlandés, es un actor en
teoría revelación, su carrera nos remite a 5 películas, 2 cortometrajes y 3
series de televisión, cuya principal característica, ha sido la versatilidad en
sus interpretaciones. Como Luke, no
podemos ver demasiado de él, más que su breve participación como Jimney Cricket
para Jocelyn y los atisbos de su papel como Alfa de la manada de hombres lobo
de New York. Creo que Aidan aún puede ofrecernos más de su talento hacia Ciudad
de Ceniza, donde seguramente le veremos cobrar aún más fuerza de la que mostró
en Ciudad de Huesos.
JONATHAN
RHYS-MEYERS: Nacido en Dublín,
llega al reparto de Ciudad de Huesos con una trayectoria de 38 películas y 3
series de televisión; Rhys Meyers es bien conocido por su capacidad histriónica
y dramática, pudiendo ser lo mismo el tímido Casandro en Alexander, que el
perverso Chris Wilton en Match Point o el cruel Enrique VIII en Los Tudor. Su versatilidad y fuerza escénica siempre le
han distinguido y en el caso de Ciudad de Hueso, a pesar de lograr transmitir
la total insania de Valentine, tuvo la desgracia de tener un director que no
supo aprovecharlo y es por eso que la mayor parte de la gente ha hablado sobre
su participación juzgándola de exagerada y fuera de lugar.
KEVIN
ZEGERS: Desde Ontario, Canadá, llega con un
trasfondo de más de 40 películas, 15 series de televisión y 5 cortos. Su trayectoria es bastante clara y no hay
duda de que este chico conquista con su sonrisa dulce y esa expresión de ojos
tan cambiante. En el caso de Kevin, tenemos
una situación similar a la de Jonathan, y es que el director no supo sacarle
provecho al talento que tenía detrás de su texto, porque Alec simplemente queda
reducido a parecer una ex novia despechada tirándole mierda a la nueva novia
del ex y es un círculo interminable.
JEMIMA
WEST: Esta Parisina se une al elenco de Ciudad
de Huesos, con un historial de 11 películas, 3 cortos y 10 series de
televisión, honestamente, me gustaría poder dar referencias previas del trabajo
de Jemima, desafortunadamente no he podido localizar alguna de sus películas
para verla con detenimiento, así que sólo tengo este elemento para poder hablar
de ella. Isabelle en pantalla, parece
plana y no se le ve proyectar absolutamente nada, no se ve lo mucho que
disfruta ponerse a prueba con sus dos hermanos, no se ve el carácter
sexualizado del que la dotó la autora, no se ve el carácter enérgico herencia
de Maryse... en resumen, no se ve absolutamente nada de Isabelle.
ROBERT
SHEEHAN:
Originario de Laois, Irlanda, forma parte del reparto de Ciudad de
Huesos, teniendo en su filmografía 18 películas, 5 cortos y 8 series de
televisión. Con Robert nos encontramos a un actor joven cuyo fuerte,
principalmente es la comedia negra y a quien se le da muy bien reírse de sí
mismo; otra gran fortaleza que tiene, es que puede imprimir un toque bastante
notorio de naturalidad en sus personajes, esto es, que no parece estar
interpretando, sino que esos personajes son tan parte de él mismo que está
totalmente cómodo con ellos, haciendo de cada uno de ellos algo tan particular
como una persona común y corriente.
Dentro de la producción, es de los pocos personajes que conservaron su
esencia original, sin embargo, una vez más la adaptación de la historia le restó
una gran proporción del mérito original que Simon tiene de base.
GODFREY
GAO: Modelo y actor Taiwanés, cuya
trayectoria filmográfica no es tan impresionante en números como la de todos
sus compañeros de reparto, sin embargo, con tan sólo aparecer a cuadro con
maquillaje y esgrimiendo una gran sonrisa, se roba la escena. El principal
problema al que nos enfrentamos con Godfrey en su caracterización de Magnus, es
que le restaron importancia, dentro del guión sólo tenemos al High Warlock en
tres escenas que ciertamente no hicieron más que dejar al espectador con ganas
de más. Ciertamente, podemos esperar
muchísimo más de él hacia Ciudad de Ceniza.
FINAL CUT: A pesar de que Zwart y Postigo Paquette
hicieron un esfuerzo para darnos una película que fuese dinámica y que no se
sintieran sus más de 120 minutos, no pueden pasarse por alto las
inconsistencias con respecto a la historia original, y también respecto a la
integración del producto final, por lo que a continuación revisaremos la cinta
escena a escena.
Comenzando
con la cinta, la conversación entre Luke y Jocelyn el día en que Clary y Simon
van al Pandemonium debía ser escuchada por Clary porque ahí se enteraría de la
existencia del tal Jonathan Christopher, aunque en su momento no lo tendría por
algo demasiado importante; posteriormente, en el Pandemonium independientemente
de que cambiaran todo el entorno al acceso y lo transformaron de algo popular a
algo underground marcado por la runa de Angelic Power hace que pierda el
sentido como algo para subterráneos que están buscando conservar su anonimato y
básicamente están poniendo un cartel de neón para todo aquel que tenga la
visión despierta.
Respecto al
asesinato del demonio en el bar... estamos de acuerdo que la orden del día para
los jóvenes cazadores de sombras era eliminar a esa criaturita infernal, pero
también tienen ese pequeño tema de la absoluta confidencialidad en su operación
y el hecho de matar al demonio a mitad del antro no fue la más brillante de las
ideas, incluso la escena es visualmente chocante porque no permite al espectador
interpretar el simbolismo del entorno y entender del todo el papel del lugar y
los hechos que ahí suceden.
De vuelta a
la cotidianeidad, me parece ingenioso el hecho de que manejaran una especie de
"marca de agua" puesta en el hechizo de Magnus para bloquear la mente
de Clary, sin embargo, volvemos al mismo punto de la incongruencia con respecto
a las runas ¿por qué un subterráneo utilizaría una runa que técnicamente no
está autorizado para emplear como marca de refuerzo para su hechizo?, como se vea,
no tiene sentido. Yendo directamente a
la escena del rapiñador posterior a la magistral paliza que Jocelyn le pone a
sus atacantes, fue bastante decepcionante ver que desde ese momento estaban
señalando a Clary como alguien demasiado frágil para luchar sus propias
batallas y aunque intentan rescatar un poco del ingenio de la heroína con la
pequeña explosión creada, sin embargo ahí es importante tomar en cuenta que,
por muy cazador de sombras que seas, es fisiológicamente imposible reaccionar
rápidamente después de haber estado expuesto a semejantes condiciones de ruido
y calor; de igual forma con Simon, cuando recibe los golpes de extintor en la
espalda, un extintor completamente cargado y funcional, siendo impactado con
fuerza sobre la espalda de alguien invariablemente lo debería tirar al suelo
¿qué estamos hablando de super humanos?
Ahí podemos
pasar directo a Dorothea que para efectos de comodidad del argumento, o de la
guionista, o de quien fuera, fue convertida en un Warlock cuando todos sabemos
que ella no era más que la guardiana del Santuario de la Warlock que la adoptó,
de igual forma ¿cuándo perdió la calidad de Santuario la casa de Dorothea? ¿por
qué eliminaron uno de los dos portales fijos de todo New York?, mejor dicho
¿por qué eliminaron los dos portales de New York, transformando el medio de
transporte en el triángulo de las Bermudas sobre el que está construído el
Instituto? Todas estas, incógnitas sin
respuesta, eso sin contar el intento de lectura mental hacia Clary y todo ese
monumental montón de paja que no venía al caso con la historia.
Es en este
punto donde todo se conjunta, es decir: cazadores de demonios, niñas que no son
tan normales como parecen, niños que son demasiado normales para todos estos
rollos, hombres lobo y para ponerle la cereza al pastel: demonios. Si bien, la pelea entre los compinches de
Valentine y Jace está muy bien coreografiada, la sucesión de la escena es
demasiado vertiginosa, porque estamos primero viendo a Jace y Clary espiando
por detrás de los libros y de pronto todo se vuelve golpes en todas
direcciones, para culminar en dos demonios muertos a media calle.
Otra cosa
que me resulta bien bien interesante, fue el cómo Clary, sin marcas
permanentes, sin runas de ningún tipo, sin asistencia de su héroe particular,
se las arregla para llegar de la tienda de Luke, en metro y hasta ver el Instituto,
para finalmente caer, cual damisela en apuros, desmayada en los brazos de
cierto rubio por todos conocido; si realmente estaba con una herida provocada
por un demonio ¿no debería habérseles puesto mal de camino? Como sea, puede pasarse por alto ese
detalle, lo que realmente pudo parecer extremadamente ridículo, fue Simon
entusiasmado por las runas, cuando se supone que él, entre todos, era el que
más estaba desconfiando de todo.
Y hablando
de cosas perdidas ¿dónde estaba metido Hugo cuando aparece Hodge en la
biblioteca? ¿de qué demonios hablaba Alec cuando dijo de las runas para el
corazón roto? ¿por qué esa biblioteca parece más galería de arte que
biblioteca? Esto me lleva directamente a
la Ciudad de Hueso, que en lo personal, cubrió todas mis expectativas, aunque
la vi demasiado luminosa para estar en el subsuelo. Lo que no debemos perder de vista, es que en
los recuerdos bloqueados de Clary, se ve de más de 7 años cuando conoce a Luke,
cuando se supone que tenía no más de cinco al suceder este hecho.
Es así como
llegamos a la fastuosa y muy colorida fiesta de Magnus Bane, donde pudimos ver
a toda clase de subterráneos departiendo en el mejor de los ánimos , así como
al magnífico High Warlock of Brooklyn presumiendo unas largas y muy bonitas piernas. Dentro de esa fiesta, creo que la única cosa
que me hace quejarme es justamente que fue MUY POCO MAGNUS para dos horas de
película y que lo redujeran a dos escenas cortas y un par de cameos
posteriores. Impagable el fan service
con la echada de tejos hacia Alec y el sutil coqueteo de este último, que le
sonríe veladamente cuando ve a Jace voltear.
Por otra
parte, tenemos otro cambio que es de suma importancia y es el hecho de que
Simon no pasa jamás por ser una rata, no conocimos a Raphael Santiago y peor
aún, van a justificar con una mordidita y un brebaje que termine siendo el
daylighter... Hell No! Otro detalle
importante, es que volvieron a dejar en la pasividad total a Isabelle, quien
definitivamente no se habría dejado amedrentar por unos vampiros. Este es uno de esos cambios que la guionista
realmente no debió haber hecho, porque de nuevo, está cambiando todo el
trasfondo de la historia y nos quitó de las manos poder conocer al verdadero
lugarteniente de los vampiros de la gran ciudad. Ni que decir de las secuencias del rescate,
aunque el set del Dumort es todo lo que podría esperarse del nido de los
vampiros, hay cosas que entraron con calzador, como el hecho de que no hubiese
una negociación por el rescate de Simon y el hecho de que a este pobre le
vieran cara de versión moderna de Cristo en sujeción por cables, una escena que
me supo bien amarga a decir verdad.
En otro
tipo de fiestas, ¿qué tal una fiesta para dos? ¿qué tal si esos dos son Jace y
Clary? ¿qué tal si él le da una gran piedra? ¿qué tal si ella jode el detalle
haciendo alusión a un diamante? Desde la
primera vez que vi la cinta, me quedó clarísimo que la escena del invernadero
fue larga en una forma obscena -no sé que lo hizo más obscena, si lo cliché de
su montaje, la duración o las mil y un niñas que atentaban contra la integridad
física de mis tímpanos-, la cuestión es, pudo ser un momento realmente bonito
on screen, pero la frasecita lame de Clary le vino a dar al traste y si de ahí
agregamos que aparece el -hasta entonces- desaparecido Hugo, sin explicación,
sin motivo... simplemente planta sus patitas de pájaro y agita sus plumitas
negras.
No podemos
dejar de lado una de las escenas clave para la dinámica en la de por sí
trastornada vida de nuestra heroína, cuando Simon le interrumpe el arrumaco con
el señor Voluble Wayland, que termina en él portándose como un idiota y Simon
con el corazón hecho puré, marchándose sin mirar atrás, mientras cojea con
muchísima dignidad. Puntos menos... para
ambos, uno por dramático y el otro por hablar demasiado tarde. Gran detalle ese de los cuernitos, el bigote
y la piocha de demonio en el dibujo de Jace.
Y una vez
que nuestra heroína descifra dónde está y como sacar la copa mortal, reúne a su
peligroso escuadrón de la muerte para ir a cazar... momento, no es así, la
heroína convence a la diva rubia del orgullo herido de ir a buscar la copa y
por supuesto, buscar al del corazón roto para que le consiga medio de
transporte y de pasada les salve heroicamente el trasero, o por lo menos así
sucede en el libro. En la película Simon
va a dar a la casa de Clary porque el torpe de Eric, miembro de su banda sin
nombre, le avisa que vio a la susodicha cerca de su casa y por un golpe de
pala, ganó el tiempo suficiente para que Jace, como siempre, resolviera los
problemas.
La cuestión
con esta escena, está justamente en el hecho de que el dúo dinámico
Zwart/Postigo, encontró divertidísimo que Clary le avisara golpeando la
ventana, y no sólo eso, sino que cuando ellos llegaran la supuesta Warlock ya
estuviese posesa y todavía peor, que fuera un demonio hijo de vecina, cuando en
el libro el demonio al que enfrentan y vencen gracias a que Simon también es un
buen arquero, es nada más y nada menos que Abbadon, uno de los príncipes del
averno ¿casual, no?
Ahora
estamos de vuelta en el Instituto, con Isabelle cabreada, Jace
cabreado/preocupado, Simon sin entender un pelo de lo que pasa, Clary siendo
totalmente inútil y Alec básicamente moribundo, nos encontramos con un error
grave de secuencia, porque se ve como llega el valeroso escuadrón de la muerte
a poner a Alec en una camilla y empezar a atenderlo como Raziel les da a
entender y cuando Isabelle echa a Clary de la enfermería, ésta va a buscar a
Hodge. Quién dicho sea de paso, es el
único adulto presente, y que no sólo se comporta de lo más natural con un
cazador de sombras en edad aún ilegal muriéndose por herida de demonio en la
enfermería; aparte dice que ya ha llamado a alguien que les ayude con lo grave
que está... ¿qué no se suponía que acababan de llegar?, es interesante como
pasa el tiempo en ese lugar, aparentemente no sólo está protegido por glamours,
también su tiempo está hechizado y corre de forma diferente.
Otro error
fuerte en la adaptación, es el hecho de que Hodge fuera puesto como el autor
intelectual de la idea feliz del brotherzone,
especialmente después de que una muy cotizada Clary se escapara como
niña indisciplinada de los brazos de papi Valentine por un portal que, reitero,
no debería existir... al menos, no en el instituto. El hecho de que intentaran manejar la versión
de que Jace pudiera ser objeto del mismo bloqueo mental que Clary, me pareció
bastante molesta, por el simple hecho de que Jace SIEMPRE estuvo seguro de su
supuesto origen y por eso reconoció a Valentine como padre tan pronto lo
vio.
Así es como
llegamos a la parte final, donde no sólo quedaron a deber a los tan socorridos
repudiados de Valentine, a la manada atacando en cuatro patas y esa pelea de
ingenios y armas entre Luke y Valentine, que de verdad me hizo falta, porque es
la única forma de entender el por qué el hombre lobo lo odia tanto y cómo la
competencia por Jocelyn no sólo sigue vigente, sino que traspasó la barrera de
tiempo y espacio. Sobra decir en este caso,
que la invocación de demonios dentro de un lugar sacro es no sólo poco
factible, sino insultante para quien conoce un poquito sobre el tema y
finalmente, la dichosa pelea que termina en la fractura del portal y no deja ni
un fragmentito que pueda resultar en el pie de trama para Ciudad de Ceniza.
El elemento
final que aún intento descubrir cómo van a resolver para la siguiente entrega,
es el hecho de la existencia de las dos copas, es decir, la réplica que se
llevó Valentine y la que Clary tiene en la carta de Tarot.
Calificación: